Diputado Pablo Fernández del Campo
3 de febrero de 2010

Todos sabemos que en los últimos años nuestra ciudad ha registrado un crecimiento acelerado demográficamente hablando, como resultado de la migración de nuestra metrópoli y de lo atractiva que resulta Puebla por sus centros de estudio y de prestigio que han convertido a la población flotante en residentes.

Sin embargo, ha sido precisamente el factor migratorio del campo a la ciudad, el que ha generado el surgimiento de asentamientos irregulares que, con el paso del tiempo, se han convertido en colonias, mismas que gradualmente van requiriendo de servicios públicos elementales, seguridad pública e infraestructura.

Este fenómeno tiene una mayor presencia en las demarcaciones del sur de la ciudad, donde estos asentamientos irregulares, hoy tienen en sus habitantes frente a una demanda legítima, propia de una realidad a la que no podemos cerrar los ojos.

Como legislador he tenido la oportunidad de recorrer mi distrito y en general la Ciudad, de intercambiar puntos de vista con la gente, con los vecinos que habitan las zonas de mayor pobreza en nuestra ciudad para conocer su problemática y atender la demanda urgente y también la de mediano plazo.
Así, además de la permanente petición de servicios que hemos canalizado al Ayuntamiento, existe una exigencia que se vuelve una constante en estas colonias periféricas que es la certidumbre jurídica por sus predios.

La semana pasada tuve diversos recorridos por el sur de la ciudad y reuniones con hombres, mujeres y jóvenes que están preocupados por la necesidad de contar con un documento que les garantice que el lugar en el que viven es suyo y, de esta forma, garantizar su único patrimonio.

Es conveniente señalar que el Ayuntamiento de Puebla ha trabajado para atender este problema que es complejo, pero que también es de urgente necesidad, tomando en cuenta que la ciudad demanda un crecimiento ordenado y a través de instrumentos de planeación adecuados.

El compromiso personal con los colonos es recabar información, gestionar ante las autoridades su incorporación a los programas de regularización de predios, además de darle seguimiento a cada una de las acciones que se vayan tomando.

Puebla es una ciudad con más de mil colonias reconocidas, muchas de ellas de la periferia que apenas se empiezan a incorporar al desarrollo, pero que al mismo tiempo crecen en población y en la demanda permanente de servicios.

Resulta indispensable voltear los ojos a estas realidades, buscar alternativas, tocar puertas y abrir espacios legislativos para el debate y la solución. Esta es la única manera de alcanzar una Puebla mejor.

Diputado del PRI y Presidente de la Comisión de Gobernación del Congreso del Estado